¿CÓMO PODEMOS EJERCITAR EL DERECHO A LA CIUDAD JUSTA? ¿PODEMOS CONSTRUIR UNA CIUDAD SOCIALMENTE JUSTA? ¿QUE ES LA JUSTICIA SOCIAL? ¿LA JUSTICIA ES SIMPLEMENTE LO QUE LA CLASE DOMINANTE QUIERE QUE SEA?

Es evidente que el poder económico y político cada vez está más concentrado. Son muy pocos los dueños de la riqueza y el poder. En el mundo actual la balanza de la riqueza y el poder está más desequilibrada cada segundo, cada minuto que pasa. Cada día son más los que se suman al lado de la balanza del despojo, la exclusión y la discriminación, y menos los que se suman al lado de los que acumulan un mayor porcentaje de la riqueza y el poder.

Ciudades duales de lujo y miseria. Ejemplos como la ciudad de Panamá, solo tenemos que mirar el Skyline desde los barrios de chabolas y favelas, Rio de Janeiro, Pretoria y otras muchas ciudades creadas en el hemisferio sur; grandes rascacielos vacíos y al otro lado personas sin un lugar digno donde vivir.

Con el desarrollo vertiginoso de las ciudades, cuya progresión ya nos avisaba Malthus en el siglo XVIII, en su ensayo realizado sobre el crecimiento de la población, claramente nos exponía como la población crecía más rápidamente que los recursos y por lo tanto la balanza se desequilibra más y más cada vez. Este vertiginoso desarrollo mal repartido nos está conduciendo a una progresiva pauperización de la población. Actualmente se estima que gran parte del territorio que más pronto que tarde acabará siendo urbana está en manos de sólo el 2,5% de la población mundial.

Es evidente que con estos antecedentes de reparto de riqueza y poder, estamos condenando a nivel mundial a más de un tercio de la población. Cada vez son más los que están viviendo en la pobreza absoluta. Las desigualdades están aumentando tanto en los países “desarrollados” como los que llamamos “en desarrollo”.

Barrios empobrecidos son el hogar de al menos un tercio de la población y en algunos países de América Latina y África que podríamos hablar de hasta el 80-90 % de la población.

La ciudad puede ser el punto decisivo a partir del cual debemos repensar y reorganizar la lucha contra los modos del sistema actual. Tomando esta premisa, la cuestión urbana actual supone discutir qué significa hoy “la producción de ciudad”, Como podemos atajar la precariedad actual del trabajo y de la vida de los ciudadanos.

El derecho a cambiar nosotros mismos, creando un modelo diferente de sociedad urbana es uno de los más preciosos de todos los derechos humanos.

¿COMO CONSTRUIR UNA CIUDAD JUSTA? ¿QUE INDICADORES DEBERÍAN SER TENIDOS EN CUENTA? ¿COMO ARQUITECTO QUE PUEDO HACER A LA HORA DE DISEÑAR UNA CIUDAD CON ESOS PARÁMETROS?

Mediante el uso de los derechos humanos en la ciudad (carta mundial por el derecho a la ciudad)

Una ciudad en la que todas las personas disfrutan y ejercen los derechos humanos y las libertades fundamentales. Los Gobernantes deben legislar conforme a los compromisos y cartas de los derechos humanos. Los arquitectos y urbanistas proyectando las ciudades y los edificios en base a unas condiciones de bienes colectivos de dignidad, equidad y justicia social

Mediante la participación de los ciudadanos en democracia y la buena gobernanza

Ciudades donde los ciudadanos participan en el gobierno. Por medio de la política debemos llegar a justicia social; Es fundamental la acción, la presión política, para que no se pierda la tensión y el ciudadano tome parte en estas decisiones.

La administración tiene una jerarquía en orden vertical que facilita bastante el fluir de la información y la coordinación pero es muy importante, sobre todo en las grandes ciudades que ese mismo orden se trasmita en horizontal mediante la creación de distritos y asociaciones desde los que fluya la información.

La pro actividad de políticos y funcionarios es fundamental para que esto ocurra. Una ciudad donde sus habitantes participan de todos los espacios de decisión con espacios desde los cuales es posible realizar el seguimiento y evaluación de las políticas públicas.

Mediante el equilibrio en la balanza de los recursos y del trabajo

Una ciudad que reconduzca la capacidad productiva de sus habitantes, en particular las clases medias y bajas, fomentando el desarrollo de actividades económicas solidarias. Se trata del derecho a un hábitat que sea productivo, lo que generaría ingresos y fortalecería la economía popular y no, los beneficios de unos pocos.

Mediante la gestión sostenible de los recursos

Una ciudad donde sus habitantes y autoridades garanticen una relación responsable con el medio ambiente, de una manera que hace posible una vida digna para las personas, las comunidades y los pueblos, en igualdad de condiciones y sin afectar las áreas naturales, reservas ecológicas. En esto los arquitectos tienen que proyectar pensando en la mezcla de usos, variación en las tipologías edificatorias, densidades que permitan mantener una vida urbana digna.

Mediante un nuevo diseño de la ciudad

Erradiquemos la ciudad segregada, ineficiente, separada en trozos en la que las diferentes clases sociales, el comercio, las oficinas, las áreas de espectáculos, se van separando entre sí constituyendo verdaderas áreas especializadas y propiciando inútiles desplazamientos para poder llevar a cabo las labores más cotidianas con una infrautilización del espacio verdaderamente clamorosa.

Debemos construir una ciudad que fortalece la convivencia social, la recuperación, ampliación y mejora de los espacios públicos, y su utilización para el encuentro, el ocio, la creatividad, así como la expresión crítica de las ideas y posiciones políticas.

En síntesis, el derecho a la ciudad justa no debe limitarse a la defensa de los derechos humanos individuales con el fin de mejorar las condiciones de vida de sus habitantes; hay que integrar derechos y responsabilidades implicadas en la gestión, la producción y el desarrollo responsable de la ciudad. Desde esta perspectiva, no sólo abarca la construcción de condiciones que aseguren el acceso de todas las personas sin discriminación a los bienes, servicios y oportunidades existentes en la ciudad. Debemos pensar que ciudad queremos para el futuro.

DOCUMENTACIÓN AUDIOVISUAL COMO APOYO AL TEMA

El motivo de este desarrollo escrito es: “la ciudad justa”.

Me atrevo a preguntar al lector que reflexione conmigo de lo siguiente: ¿la ciudad es injusta por conveniencia?

Cabe suponer que con el paso de los tiempos y las experiencias de países vecinos con ciudades similares, ¿no han pasado ya por lo mismo o parecido? Que los políticos, los estados, los urbanistas, ¿saben perfectamente que es justo para una ciudad y que es injusto para la misma?
Quizá no conviene que sea justa.

Quizá conviene que la ciudad sea un campo de obstáculos donde la gente invierta tiempo y nervios en poder llegar a su trabajo, en que deba comer en 45´ de pie para regresar a su puesto laboral, del cual no tiene certeza si conservará a corto plazo; quizá lo que se pretenda es que la gente no tenga tiempo, ni vida, para poder pensar que es lo que necesita verdaderamente y que es lo importante para su desarrollo personal.

Da la sensación que estamos en una batalla que está perdida desde el comienzo. ¿Por qué nosotros vamos a ser capaces de hacer, lo que generaciones atrás, no han conseguido?

Con atrevimiento y rotundidad respondo: porque no les han dejado; porque no nos van a dejar.

Como documento audiovisual, invito al lector a que pueda ganar 50´ de su vida, que es lo que dura, viendo el video del siguiente enlace, el cual resumiremos a continuación para poder tener una idea de qué contiene, y poder reflexionar sobre ello.

El documental se llama: “La ciudad es nuestra”. Y lo podéis encontrar en:

Seguramente todos nuestros padres y abuelos, sepan bien de lo que habla el documental y les haya tocado vivirlo en sus propias carnes o muy de cerca.

El documental narra la época de 1.950 en la capital de España, Madrid. De qué situación se vivía en aquellos momentos; todo ello documentado con imágenes y comentarios de personas de la época con los sucesos que ocurrían a diario y las preocupaciones importantes que tenían.

Aviso al lector que puede parecer que está viendo una marcianada de hace siglos, pero la realidad del asunto, es lo que se ha vivido hace apenas 60 años y de lo cual podemos tener información y cotejarla en los círculos familiares más cercanos en cada una de nuestras casas. Se puede ver como en ese tiempo, a excepción de la ciudad, había caminos en vez de carreteras, de cómo en la periferia no había nada más que terrenos descuidados, insalubres, intransitables donde la gente no solo tenía que pasar por allí andando para ir al centro, sino que además tenía que asentarse y vivir allí en chabolas, sin agua, sin redes de vertidos, de ilegales y teniendo que pagar los sobornos del momento a los funcionarios del estado, para poder construir y vivir allí.

No solo viven de ilegales sino que veinte años más tarde después de haber conseguido que salgan varias propuestas de mejora en las viviendas realizadas, los quieren expropiar para generar un parque en la zona donde se asentaban.

Esa gente es la misma que tiene que abandonar las casas en donde vivían en los pueblos, por falta de trabajo en los mismos y jugársela trasladándose a la ciudad en busca de un futuro laboral sin tener nada apalabrado; ni casa, ni trabajo, etc.

Aun así y con todo en contra, con un nivel cultural y formacional escaso la gente experimenta la necesidad de juntarse, hacer piña, jugarse en equipo para a través de formar asociaciones hacerse un núcleo más fuerte y compacto y poder pelear por sus intereses, independientemente del color político del que fueran.

Llama la atención, como llegan a una conclusión. Comentan y afirman a lo largo del documental que la administración es la que genera el hundimiento de los pueblos haciendo que no haya trabajo para que así la gente vaya a la ciudad a trabajar y no tengan que pagar ni hacerse cargo de dietas ni desplazamientos.

Esa mano de obra barata que va a trabajar de sol a sol, lo va a hacer con el único objetivo de conseguir su pan y el de su familia, y se va a utilizar en generar una ciudad más grande, más moderna, enfocada al capitalismo y al consumismo de los más ricos y poderosos. En aquel momento la gente era consciente al 100% de que sucedía, y así lo comunicaban en las asociaciones, pero los medios de comunicación eran escasos y manejados. Acaso no sabrían los bien posicionados que lo lógico era trabajar para que los más necesitados pasen a serlo un poco menos, a proporcionarles una casa y un trabajo y a realizar unas infraestructuras periféricas más cómodas y seguras. Pero eso no sucedió.

Hace 60 años, no había coches eléctricos, modernos edificios, ni la gente se comunicaba comprar el pan por un “chats App” como ahora; pero hace 60 años tenían los problemas fundamentales que tenemos hoy en día y que dudo que se resuelvan a corto plazo sin una fuerte terapia de choque. No hablo de que la gente salga a la calle con pistolas, hablo de que la gente se conciencie del problema real que hay; de que las personas que nos representan, no nos representan más ya que viven en una realidad paralela y son incapaces de poder saber la situación actual de la gente. En el documental se nombra que la gente que debe de representar a la gente, es esa propia gente respaldada por un programa aprobado por ellos mismos. Para que, como personas humanas que somos, en caso de debilidad y sucumbir al poder, al dinero, a la vanidad; pueda sustituirse ese representante, pero siempre se estará respaldado por ese programa, ese guión, esa idea fuerza, que será el bien común de la población.

No me cabe ninguna duda que esa idea que tenían muchos de nuestros padres y abuelos era la cimentación perfecta para construir “una ciudad justa”.

COMPARATIVA CERCANA A NUESTRO EMPLAZAMIENTO

Como elemento de comparación entre la reflexión generada del tema expuesto, en nuestras inmediaciones geográficas de Zaragoza, podemos señalar la del barrio de San Pablo.

Este barrio se generó en las inmediaciones de los límites de la ciudad para albergar a gente en condiciones pésimas las cuales trabajaban en el desarrollo de la ciudad. Como fue un foco de asentamiento muy grande se generaron mercados a su alrededor donde la gente podía vivir a base del trueque y de comprar las necesidades básicas para subsistir. Viviendas pequeñas, sin las necesidades básicas es lo que rodeaban las inmediaciones de la ciudad. Tal es así que en el momento en que la ciudad se desarrolla el barrio de San Pablo se queda vacío y abandonado. Es ahí donde empieza su declive y es foco de la marginación de la zona y de las gentes que allí viven.

No es hasta nuestros tiempos, y gracias a las acciones de las asociaciones de vecinos del propio barrio, cuando se está empezando a reactivar y a realzar las gentes y calles del mismo, cambiando poco a poco la imagen que hasta entonces había de él y que aun en estos días hay en según y que zonas.

LECTURA “EL DERECHO A LA CIUDAD” (D. HARVEY)

Como apoyo a este artículo ha servido de base el texto titulado: “El derecho a la ciudad”.

Esquematizamos las ideas fuerza de las que trata el texto para ayudar a comprenderlo y poder pensar o debatir sobre el. 16 Ideas:

  1. En nuestra época los derechos humanos están basados en el modelo político y ético.
  2. La propiedad privada y la tasa de ganancia, prevalecen sobre los demás derechos.
  3. Cuando los derechos humanos, se centralizan en derechos colectivos, suelen tener buenos resultados en cuanto a su difusión.
  4. Todos tenemos derecho a la ciudad.
  5. Hemos sido recompuestos urbanísticamente varias veces sin saber cómo ni por qué.
  6. Preguntas que lanza:
    1. ¿Ha contribuido al bienestar humano esa espectacular urbanización?
    2. ¿Nos ha hecho mejores personas, o nos ha dejado en suspenso en un mundo de anomia, alienación, cólera y frustración?
    3. ¿Nos hemos convertido en meras monadas zarandeadas de un lado a otro en un océano urbano?
  7. Conexión íntima entre: el desarrollo del capitalismo y el proceso de urbanización.
  8. Realiza una reflexión sobre el movimiento capitalista:
    • El capitalista invierte el dinero con la intención de recuperar lo puesto, más un beneficio generado. Con el beneficio generado, parte se reinvierte y parte se gasta en placeres.
  9. Pone diferentes casos de crisis, entre ellos Paris. 2º Imperio 1.852-1870 en la crisis de 1.848.
    • Haussmann entiende la misión de resolver el problema del excedente de capital y mano de obra mediante la urbanización. Reconstrucción de Paris absorbe trabajo y capital generado.
    • Genera una nueva ciudad y cambia la actitud de la gente. Generan negocios nuevos que se abren.
  10. Similitud de las hipotecas suprime y la crisis de los activos inmobiliarios. Les sucede a los hermanos Pereire en 1.867-1.868 en Paris con el Credit Minilier.
  11. La crisis actual más severa. Posible crack de EE.UU. Importancia de la presencia de Internet y el alcance de cualquiera a ella.
  12. La reestructuración urbana afecta a los más desfavorecidos por los barrios en los que se actúa. “Destrucción creativa”.
  13. Propone mayor control democrático sobre la producción y uso del excedente.
  14. El derecho a la ciudad va cayendo cada vez más en manos de intereses privados, o casi privados.
  15. Michael Bloomberg, alcalde de Nueva York, dice: “construir como Robert Moses pero sin olvidar a Jane Jacobs”.
  16. Lefebvre, dice hace ya más de medio siglo: “la revolución de nuestra época tiene que ser urbana, o no será”.

Bibliografía trabajada

H. Lefebvre, El derecho a la ciudad, Barcelona, Península, 1969.

D. Harvey, Ciudades rebeldes: del derecho de la ciudad a la revolución urbana, Madrid, Akal, 2013.

T.R. Malthus An Essay on the Principle of Population.1798

ARISTOTELES-POLÍTICA Un texto sobre la justicia.

J.Jacobs. Muerte y Vida de las Grandes Ciudades Americanas.

“La ciudad es nuestra”: https://www.youtube.com/watch?v=RxpeFxtQXLs&feature=youtu.be

Autores: Beatriz Carnicer, David Jariod y José Luis París